Las trampas de la Gran Pirámide Keops

Hay muchas razones para creer que pueden existir cámaras desconocidas dentro de la Gran Pirámide Keops. En su conjunto, este monumento se podría considerar un ingeniosísimo rompecabezas espacial formado por más de dos millones y medio de piezas cada una de las cuales, como promedio, pesa dos toneladas y media y está unida a la siguiente con tal exactitud que la holgura jamás sobrepasa el medio milímetro.

Esas condiciones hacen de ella la caja fuerte más poderosa y perfecta que jamás se ha construido. En teoría, entre sus bloques podrían esconderse centenares de espacios huecos y cámaras de todos los tamaños.

Por otra parte, la Gran Pirámide Keops está llena de trampas. Al-Mamum, que fue el que llegó más lejos en los expolios, tuvo que interrumpir su saqueo cuando empezaron a caer bloques del techo sobre los infortunados trabajadores.

En su aspecto exterior, nada diferenciaba a estos bloques de los contiguos. Pero, a diferencia de los otros, estos últimos habían sido dispuestos de tal forma que cayeran al retirar los que los sustentaban, aplastando al primer intruso y bloqueando el camino a los sucesivos.

Tales trampas no tendrían sentid si más allá sólo hubiera roca maciza. Y, en cambio, lo tendrían plenamente si hubieran sido dispuestas para hacer desistir a los expoliadores; porque nadie se toma la molestia de colocar trampas para ladrones cuando sabe que no hay nada que robar.