Jim Cripps es un hombre nacido en Tennessee (EE.UU.), que se ha ganado el mote del “Jugador de bowling que lanza hacia atrás” por una sencilla y evidente razón: es uno de los pocos hombres que juegan a los bolos al revés sin siquiera mirarlos directamente.
La historia de este curioso jugador de bolos empezó con una simple apuesta. Jim amaba todo lo relacionado con los bolos, pero ha admitido en diversas entrevistas que era bastante malo en este deporte, así que un buen día un amigo lo desafió para que tratara de hacer 150 puntos jugando de espaldas. Dicho así suena casi imposible, pero Jim asegura que consiguió hacer un strike en su primer tiro, y terminó con una marca total de 163, 13 por encima de lo que había apostado con su amigo. Como pueden imaginar los lectores de Cuasar, sus habilidades mejoraron mucho en los años que siguieron, y ahora, a principio de 2013, tiene un promedio de 204 palos, y ostenta un Récord Guinness de 278. Nada despreciable, y muy difícil hasta para los que juegan de frente, que es la forma normal de este deporte.
Lo curioso de este jugador es que aunque en la forma tradicional de jugar a bolos él era más bien mediocre, ha sido capaz de inventar una nueva técnica para mejorar su marca. Es, sin duda, todo un logro y algo muy admirable.
Ha llegado a ser tal increíble su domino, que incluso coloca una silla en medio de la pista y es capaz de hacer pasar la bola por entre las patas consiguiendo tirar TODOS los bolos. ¡Absolutamente impresionante!
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